El concepto “Historia” tiene varias acepciones. Por un lado, es la ciencia que tiene como objeto de estudio el pasado (y acaso el presente) en el amplio sentido de la palabra y en todos sus ámbitos del ser humano, siendo ciencia en tanto que recurre a un método científico, en común con las ciencias sociales. Por otro lado, se refiere al periodo que transcurre desde la aparición de la escritura hasta la actualidad, siendo muy difícil el establecimiento de una fecha universal a causa de los diferentes progresos evolutivos de cada región. En otros casos se refiere al pasado mismo.
El propósito de la historia como ciencia es estudiar los hechos y procesos acontecidos para interpretarlos objetivamente y establecer explicaciones. Para ello recurre a otras disciplinas, auxiliares, que le valen como instrumentos para obtener, procesar e interpretar los datos obtenidos.
Aunque el proceso histórico en sí es único para facilitar el conocimiento y la transmisión de este se ha dividido en varias grandes etapas, si bien tampoco se puede señalar fechas exactas puesto que cada región desarrolla la etapa en un momento diferente, a lo que se une que se han documentado casos en que no se pasa por el presumiblemente mismo proceso. Influyen en ello una multiplicidad de factores.
En todo caso, se suelen señalar los siguientes grandes estadíos o etapas:
- Protohistoria
- Edad Antigua
- Edad Media
- Edad Moderna
- Edad Contemporánea